Tipos de alisados y sus diferencias
15 abril 2024
El invierno, las lluvias y la humedad se convierten en el peor enemigo de nuestras melenas. Por eso, es un buen momento para los alisados, Pero, ¿cuál elegir?
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Somos expertos coloristas, especialmente en las técnicas Babylights y Balayage. Un buen dominio del dolor define a un buen estilista. En Espacio Kibo también hacemos uso de la corrección de reflejos rojizos y otras técnicas para ajustar el tono hasta llegar al color deseado.
Esta tonalidad es la más clásica. Está pensada para melenas que, generalmente, ya son rubias y buscan un tono más claro, frío y unificado. Para conseguir esta coloración se huye de cualquier mecha, balayage o babylights, es el mismo rubio de la raíz a las puntas.
Con su subtono frío, esta elección hace que la melena brille, que parezca natural y que desprenda destellos dorados. Sin embargo, requiere bastante cuidado para que no se pierda el brillo y la unidad.
El rubio danés está inspirado en el tono natural que tienen muchas de las personas de Dinamarca. Es una tonalidad bastante clara, una de las más claras de la paleta de rubios que manejamos en Espacio Kibo. Sin embargo, y a pesar de que también cuenta con un subtono frío, tiene un matiz amarillo que le da calidez.
Esta coloración es perfecta para pieles claras, pero con subtono frío. En aquellas pieles cuya tonalidad es más amarillenta puede quedar recargado.
Al igual que haría la miel, este rubio tiene el poder de endulzar el rostro. Al contrario de la mayoría de tonalidades rubias, este color es bastante cálido. Esta cualidad lo hace perfecto también para morenas que quieren conseguir dar brillo y movimiento a su melena.
Este tono se puede conseguir de diferentes maneras:
El rubio ceniza es el tono que queda bien a todas las pieles. Muy claro, con un subtono frío que se potencia con el matiz ceniza. Aunque también existe una variante algo más oscura, que deja el pelo mate, pero con una gran intensidad.
Este tinte queda bien independientemente de la edad. De hecho, es perfecto para disimular las primeras canas. Es uno de los tintes más sencillos de mantener, pero sí que se deben utilizar productos específicos. Si esta es tu elección, en Espacio Kibo te ayudaremos a conseguir el rubio ceniza perfecto para ti.
El smoky gold es una tonalidad de rubio bastante oscuro, con algunos matices dorados. Es muy cálido, y se consigue jugando con las diferencias entre raíces, medios y puntas. Se considera uno de los tintes más “personalizables” ya que no existe un tono concreto que lo defina. Cada uno de los tratamientos se adapta a lo que busca la persona, a su color de cabello natural, etc.…
Se trata de uno de los tintes rubios más versátiles, ya que es perfecto tanto para oscurecer pelos naturales más claros, como para morenas que quieren empezar con el rubio.
El tinte castaño claro es un clásico, pero perfecto como transición. Es el tono para las que no quieren un rubio, ni tampoco algo más oscuro. Este color aporta vitalidad a la melena, movimiento, da calidez al rostro y lo rejuvenece. Además, es uno de los más naturales, ya que parece que no vayas teñida.
En el castaño claro existen diferentes variedades, que pueden depender de tu base de color natural. Sin embargo, es una de las coloraciones más sencillas de mantener.
No es una melena negra, pero no queda lejos. El moreno oscuro da un brillo diferente al cabello, aportándole mucha vitalidad. Al contrario de lo que se piensa, es perfecto para cualquier tono de piel. Además, si tienes los ojos claros conseguirá destacarlos al máximo.
Al tratarse de un tinte oscuro, cualquier cabello, ya sean rubios o castaños claros, pueden conseguir fácilmente un moreno oscuro. Los únicos cuidados que requiere son, en el caso de melenas claras, una revisión periódica de las raíces y productos específicos para evitar los reflejos rojizos.
El castaño avellana cálido es una versión renovada del castaño medio. En este caso, tiene reflejos dorados y cobrizos, que le aportan una gran profundidad a la melena. Gracias a esta luminosidad, se consigue rejuvenecer el rostro y darle brillo. Además, es un tinte que funciona bien tanto en pieles claras, como más oscuras.
Se trata de la tonalidad perfecta cuando se quiere renovar un poco la melena, sin hacer cambios demasiado bruscos, en el caso de las morenas. O de oscurecer el pelo sin que apague el rostro, en el caso de las rubias.
Para conseguir un buen tinte castaño bronce, se debe tener muy en cuenta la base de la que se parte. No es una tonalidad sencilla de conseguir, pero en Espacio Kibo somos expertos en coloración.
Este tinte juega con los matices bronces, dándole al moreno una versión algo más clara, con un destello soleado. Es un color que, gracias a su matiz dorado, aporta vida y frescura a las melenas más apagadas.
El chocolate es uno de los clásicos dentro de los tintes castaños. Nunca pasa de moda, y se debe a que, al igual que su variante alimenticia, tiene una gran gama donde escoger. Es un tono que se adapta perfectamente tanto al color previo de la melena, como a la tonalidad de la piel.
El castaño chocolate es intenso, pero da una gran luminosidad. Además, es mucho más sencillo de mantener que otros tintes, ya que no suele tender a los reflejos rojizos.
No se trata de un color fantasía en sí mismo, pero el tinte gris queda a caballo entre las tonalidades más naturales y las menos reales de la gama. Muchas mujeres deciden dejar de tintarse el cabello y dejar sus canas al aire. Sin embargo, hay muchos pelos que, al volverse canosos, pierden brillo. En este caso, el tinte gris es el gran aliado.
En otros casos, para conseguir el matiz gris, se debe realizar una coloración y, posteriormente, aplicar el tono. No es sencillo de conseguir y también requiere de ciertos cuidados para su mantenimiento.
La coloración total fantasía ha quedado atrás. Sin embargo, las más atrevidas ven compensadas sus ganas de arriesgar con la tendencia de las puntas de color. Manteniendo el tono original en raíces y medios, la explosión de vitalidad llega en las puntas. Se puede aplicar cualquier color. Pero en Espacio Kibo te recomendamos escoger aquellos que resulten más sencillos de mantener teniendo en cuenta tu base natural.
Para conseguir cualquier tono o matiz, en Espacio Kibo confiamos en la coloración natural. Estos tintes, 100% veganos, se consiguen con diferentes pigmentos extraídos de la henna, la cassia o el índigo, entre otros ingredientes.
Erróneamente se cree que estas coloraciones son limitadas en cuanto a tonalidades. Sin embargo, cada vez existe una gama más amplia y que abarca prácticamente cualquier tono.
Estos tintes, además, son altamente respetuosos con el cabello. Algunos de ellos, incluso, cuentan con el aceite de coco entre sus ingredientes, que es muy hidratante para la melena. Los tintes más tradicionales suelen resultar más agresivos con el pelo, sin embargo, los productos orgánicos lo cuidan y lo mantienen fuerte.
En Espacio Kibo seguimos investigando el mundo de la coloración natural, consiguiendo para nuestros clientes los mejores productos del mercado. En nuestro salón contamos con una gran gama de tonalidades y de tratamientos para conseguir el color que deseas.
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